ya (nécoras)

Después de un fantástico verano, donde, gracias a Dios, los agoreros franceses se equivocaron en lo de que Galicia iba a tener el peor en años, y lucio el sol como nunca, ya es hora de volver. Ya se acabaron las tapas de tortilla y calamares en las terracitas, y ya es hora de volver a la acelga y a la pechuga a la plancha. Ya es hora de que los niñ@s dejen de trasnochar y acostarse a las tantas y vuelvan a tener una vida ordenada. Ya es hora de que después de teneros un poco (bueno un mucho) abandonad@s, vuelva a la carga; ya es hora de atender de nuevo este blog y amenizaros el día con mis historias y recetas. Este verano he hecho de todo: playa, río, mar, montaña, piscina, parque acuático e, incluso, balneario (ya os iré contando todo poco a poco) . . . de todo menos cocinar . . . pero, puedo prometer y prometo (Adolfo Suarez siempre fue mi debilidad) que a partir de este post todo volverá a la normalidad ,y mi horno volverá a ponerse en marcha . . .  Así que sin mas dilación, "Endulcémonos" vuelve a estar en marcha después de este parón necesario ( si le seguía haciendo postres a mi marido sin parar iba a acabar por poner un candado en la cocina para que no pudiese entrar) . . . espero que los que estabais sigáis por aquí y espero, también, que alguien nuevo se una a esta nuestra comunidad (homenaje a "Aquí no hay quien viva" que no volvió a ser lo mismo sin Loles León) . . . y para celebrar esta vuelta que mejor que hacerlo con unas nécoras ( o andaricas como decís en Asturias) . . .

Nécoras

Ingredientes:

• Nécoras (las que vuestro bolsillo se pueda permitir)
• Agua
• Laurel
• Sal

Ponemos las nécoras vivas en agua fría con un par de hojas de laurel y sal (pondremos 70gr de sal por cada litro de agua que ulilicemos). Ponemos la olla al fuego, las nécoras estarán listas cinco minutos después de que el agua empiece a hervir. Apartamos del fuego y ponemos las nécoras en un plato. Mojamos un paño de cocina en el agua de hervir el marisco con cuidado de no quemarnos y tapamos las nécoras con el. Dejamos que se enfríen con el paño encima y listas para comer.

nécoras